El amor es una de las experiencias humanas más intensas y complejas. A lo largo del tiempo, filósofos, poetas y científicos han intentado comprender su esencia. Entre las teorías más influyentes se encuentra la teoría triangular del amor propuesta por el psicólogo estadounidense Robert Sternberg en 1986.
Esta teoría plantea que el amor no es una experiencia única, sino que está compuesto por tres elementos fundamentales que se combinan de diferentes maneras para formar distintos tipos de amor.
Los tres componentes del amor según Sternberg
1. Intimidad
Es el componente emocional. Se refiere al sentimiento de cercanía, conexión y vínculo afectivo profundo con otra persona. Implica confianza, cuidado, apoyo y el deseo de compartir la vida con el otro.
Ejemplo: Cuando dos amigos se sienten profundamente conectados, comparten sus pensamientos más íntimos y se apoyan en momentos difíciles, están experimentando intimidad.
2. Pasión
Es el componente motivacional. Incluye el deseo físico, la atracción sexual y el impulso hacia la unión romántica. Suele ser intensa al inicio de las relaciones y fluctuar con el tiempo.
Ejemplo: La atracción intensa entre dos personas que apenas se conocen y sienten una fuerte conexión física y sexual es un ejemplo de pasión.
3. Compromiso
Es el componente cognitivo. Implica la decisión consciente de amar a alguien y mantener ese amor a lo largo del tiempo, incluso en momentos difíciles. Es lo que sostiene la relación cuando la pasión disminuye o hay conflictos.
Ejemplo: Una pareja que decide permanecer junta, formar una familia y superar los retos de la convivencia está demostrando compromiso.
Las combinaciones posibles: 7 tipos de amor
Según cómo se combinen estos tres componentes, se forman distintos tipos de amor:
1. Cariño (solo intimidad)
Es la base de la amistad verdadera. Hay una conexión emocional profunda, pero sin pasión ni compromiso.
Ejemplo: Amigos que se apoyan y confían plenamente, pero no sienten atracción romántica ni han decidido formar una pareja.
2. Encaprichamiento (solo pasión)
Existe una intensa atracción física o química, pero sin intimidad ni compromiso.
Ejemplo: Un flechazo o una aventura breve, donde la atracción es intensa pero no hay conexión emocional ni estabilidad.
3. Amor vacío (solo compromiso)
La relación se mantiene por decisión o costumbre, sin pasión ni cercanía emocional.
Ejemplo: Matrimonios que permanecen juntos por obligación o conveniencia, pero ya no comparten afecto ni deseo.
4. Amor romántico (intimidad + pasión)
Existe conexión emocional y atracción física, pero sin compromiso a largo plazo.
Ejemplo: Parejas que viven un noviazgo intenso, pero no han decidido aún si quieren compartir una vida juntos.
5. Amor sociable (intimidad + compromiso)
Hay vínculo y compromiso, pero la pasión se ha perdido.
Ejemplo: Parejas que se quieren, se respetan y deciden seguir juntas, aunque la vida sexual esté ausente o haya dejado de ser prioritaria.
6. Amor fatuo (pasión + compromiso)
Hay atracción intensa y decisiones apresuradas de compromiso, pero sin una conexión emocional sólida.
Ejemplo: Relaciones que avanzan rápido (como casarse al poco tiempo de conocerse), basadas solo en la atracción física.
7. Amor consumado (intimidad + pasión + compromiso)
Es el ideal de Sternberg: una relación equilibrada con cercanía emocional, atracción sexual y decisión de permanecer juntos.
Ejemplo: Parejas que se aman, se desean y se comprometen a cuidar su relación en el tiempo.
Reflexión final
La teoría triangular del amor de Sternberg nos ayuda a comprender que amar no es solo sentir, sino también decidir y construir. Las relaciones pueden cambiar con el tiempo, y conocer estos componentes permite identificar fortalezas, necesidades y áreas a trabajar en pareja.
No se trata de buscar el amor “perfecto”, sino de entender que el amor pleno es el resultado de cuidar la intimidad, nutrir la pasión y renovar el compromiso.